Rechazo de la Experimentación con animales

Roque Penna | dic. 2004 |. Homeopatía-Vol. 59:177-178,1994.

Summary
The ethical and scientific reasons that demonstrate why experimenting with animals is not a legitimate method for homeopathic investigation have been exposed.

The only investigation in homeopathy is in the healthy man. Any investigation with animals is not homeopathy and the results obtained are not useful for treating patients.
Resumen
Se exponen los motivos éticos y científicos que demuestran porque los experimentos con animales no son un método legítimo de investigación en homeopatía.

La única investigación en homeopatía es en el hombre sano. Cualquier investigación con animales no es homeopatía y los resultados obtenidos no son útiles para el tratamiento de los pacientes.

El hombre se guía por la tierra
La tierra se guía por el cielo
El cielo se guía por el Tao
El Tao se guía por sí mismo.
Tao Te Ching

Desde el principio quiero decir que me opongo a la experimentación con animales en homeopatía. Me indigna que el ser humano, basado en una supuesta superioridad maltrate a otros seres vivos.

Digo supuesta superioridad porque el hombre aventaja a los animales solo en las condiciones artificiales y antinaturales creadas por el mismo. Quiero decir: un hombre, solo, inerme, en medio del Amazonas o en medio de La Pampa estaría tan vulnerable como una rata en un laboratorio. Y no me refiero solamente al típico científico sedentario, de músculos hipo tróficos y abdomen fláccido; inclusive un atleta bien entrenado no sobreviviría con facilidad en medio de la naturaleza virgen.

Si la superioridad del hombre se basa en el raciocinio o en las lágrimas, de que nos sirven, si de todas maneras victimamos a seres indefensos.

Si ser superior es vivir de acuerdo al Orden Universal, los animales nos aventajan.

De todas maneras puedo aceptar que en las circunstancias artificiales en que vivimos el hombre puede, si quiere, manipular a otros seres vivos-. Y aún así me parece indigno e inútil.

Resulta instructivo observar la impactante disparidad entre el desarrollo del poder intelectual, el conocimiento científico y la destreza tecnológica, por un lado, y la sabiduría, la espiritualidad y la ética, por el otro. El conocimiento científico ha crecido exponencialmente desde los griegos, en el siglo sexto A.C. hasta nuestros días, pero difícilmente ha habido cierto progreso en la espiritualidad o los cánones morales desde Lao Tzé o Buda, que vivieron en la misma época.

Quisiera exponer mis argumentos:

  1. La homeopatía tiene como modelo propio la experimentación en el hombre sano: la experimentación con animales no es homeopatía, corno queda establecido en los principios básicos de nuestra ciencia.
  2. Si bien los seres humanos son animales- los animales no son seres humanos; por lo tanto es imposible extrapolar a las personas los resultados de los experimentos hechos en animales.
    La experiencia en animales puede ser útil a las terapéuticas que evalúan el tratamiento de un síntoma o de un órgano. pero no a una ciencia que tiene en cuenta la totalidad psicofísica del paciente
    Es útil, aunque no sea justo, ensayar tratamientos con drogas de actividad química en los animales, debido a que éstos ensayos son peligrosos en el ser humano, ya que las drogas aún no experimentadas pueden ser tóxicas o tener efectos adversos inadmisibles (lamentablemente a veces ni siquiera los ensayos lo demuestran antes de la comercialización de la droga en forma masiva) por otra parte las drogas químicas actúan localmente en uno o varios órganos, permitiendo evaluar la acción, como si el animal fuera solo un preparado farmacológico viviente; es injusto pero es racional. rnecanicista, positivista, coherente con el pensamiento farmacológico oficial
    Todo lo contrario, nuestros medicamentos son «energéticos», tienen actividad física, actúan sobre la totalidad y no permiten la evaluación parcial sobre un órgano porque la totalidad psico-física se modifica cuando el medicamento toma contacto con el ser vivo.
    La Homeopatía es una bendición para pacientes y para médicos: los pacientes se curan en forma pronta, suave y duradera; el médico profundiza en el conocimiento de las complejas y variadas personalidades de los seres humanos y conociendo mejor al ser humano, se conoce mejor a él mismo. Estas y otras bondades tiene la homeopatía, la inutilidad de sacrificar animales es una ventaja más de nuestra ciencia.
    Podemos leer en un artículo reciente: «Los experimentos en animales ponen en evidencia la actividad y similitud del medicamento homeopático».
    Sin embargo, la actividad y similitud del medicamento se pone en evidencia en las patogenesias y en la clínica, a qué viene, entonces, molestar a los animales.
  3. Leemos que los intoxican con arsénico, con mercurio, con tetracloruro de carbono: nos enterarnos que les inducen cánceres artificialmente, que se les producen shocks eléctricos y, en fin, otras atrocidades que me avergüenza recordar.
    Estas experiencias tienen el propósito de validarnos delante de la ciencia oficial.
    ¿Pero si las experiencias realizadas no lo lograron, porque lo lograrían las futuras?
    ¿Además validarnos ante quién? ¿Porqué no se valida la ciencia oficial ante nosotros?
    No necesitamos reconocernos a través de los ojos de otros, existimos por nosotros mismos: no es necesario utilizar métodos de otros, ajenos a nuestras creencias, para ser aceptados. Nuestros pacientes nos aceptan, simplemente porque los curarnos.
  4. Así como el ser humano es indivisible, el Universo es indivisible: una rata no vale menos que un hombre, desde un punto de vista cósmico; salgamos; de nuestra visión antropocéntrica y seamos compasivos. Todos los seres vivos tienen derecho a desarrollarse. El hombre no debe considerarse amo de la creación, sino apenas uno de los canales a través de los cuales se expresa la vida universal.
    Los animales son nuestros hermanos menores, debernos cuidarlos, no sacrificarlos: no están para ser utilizados por nosotros, simplemente compartimos el planeta.