La Campaña Kapparos: un buen ejemplo de lo que está mal en las campañas de un solo tema

Gary Francione | junio 13, 2014 | Traducción: Ana María Aboglio. Ediciones Ánima.

© Gary Francione.
© Traducción: Ana María Aboglio © 2014 Ediciones Ánima.
Texto perteneciente al Blog personal de Gary Francione.
13 de junio de 2014

El 12 de junio de 2014, hablé en un panel en el New York City Bar Association, participando de un panel acerca de Kapparos, que involucra el uso ritual de pollos. Una defensora de animales, Karen Davis de United Poultry Concerns, hizo una presentación donde muestra fotos de los varios abusos hechos a los pollos usados en ese evento. Kapparos implica sostener un objeto en la cabeza de alguien y decir oraciones que se supone que transfieren los pecados de ese alguien al objeto. Algunos judíos usan pollos vivos como el “objeto” de la transferencia. Karen y su grupo son parte de una campaña para poner fin al uso de pollos como en Kapparos.

Puede encontrarse un audio con la grabación del evento aquí.

Permítanme ser claro: Me opongo al uso de gallos como en Kapparos –o para cualquier otro propósito–. Y personalmente me agrada Karen Davis; me alegra que ella estuviera allí, a partir de mediados de la década de 1980, tratando de sensibilizar a la gente respecto de la difícil situación de los pollos que son, con los peces, los animales más explotados por los seres humanos, lo que a menudo es pasado por alto incluso por los defensores de los animales. Soy consciente de que ella promueve el veganismo, más que lo que lo hacen muchas otras organizaciones benéficas, pero no estoy de acuerdo con algunas de las campañas bienestaristas que apoyó y estoy molesto con la campaña anti-Kapparos.

¿Por qué?

Nada de lo que Karen mostró en su presentación es un comportamiento que no ocurra como parte del proceso de sacrificio de todos los pollos. Por ejemplo, ella mostró imágenes de lo que parecían ser jasídicos sujetando a los pollos en formas que les causaban dolor. Pero la única diferencia entre cómo son a menudo sujetados y manejados los pollos en los mataderos, y la forma en que son sujetados o manejados en el evento Kapparos, es que, en este último, son los jasídicos u otros judíos los que realizan el sostenimiento y manejo. Si estos pobres pájaros no fueran utilizados en el ritual de Kapparos, habrían sido enviados al matadero y habrían tenido el mismo exacto destino.

Esto es un ejemplo perfecto de lo que está mal con las campañas de un solo tema: alientan la idea de que los que algunos grupos hacen es peor de lo que hace el resto de nosotros. Una campaña de un solo tema que se enfoca en las pieles deja a todos los que usan lana o cuero fuera del asunto y les da una excusa para odiar o atacar a aquellos (mayormente mujeres) que usan pieles. Una campaña de un solo tema acerca de los delfines en Taiji permite a las personas, muchas de las cuales no son ni siquiera veganas, involucrarse en un vil y odioso discurso etnocéntrico y xenofóbico contra los japoneses. Una campaña de un solo tema contra el tiro a las ardillas en una comunidad rural alienta a las personas a llamar “rednecks” y “backward” [1] a los involucrados, cuando ellos no están haciendo nada diferente de lo que cualquier no-vegano hace o apoya. Y una campaña centrada en Kapparos le da a la gente la excusa para segregar a los judíos como “mala gente.”

Pienso que la campaña Kapparos permite y facilita el antisemitismo. No estoy diciendo que cualquier persona conectada con la campaña o que apoya la campaña es antisemita. Estoy diciendo que la campaña efectivamente segrega a los judíos como moralmente diferentes de todos los otros explotadores de animales. Es funcionalmente indistinguible de las campañas contra el Kashrut o la islamofóbica campaña anti-Halal en el Reino Unido.

Más aún, pasé un rato mirando el sitio de la Alliance to End Chickens as Koporos. No vi nada que indicara que la campaña era un vehículo para promover el veganismo, que es lo que se afirmó cuando elevé mis preocupaciones. Es decir, la campaña Kapparos no sostiene que Kapporos es como todas los demás matanzas de pollos, y que todo en su conjunto debe ser detenido porque no podemos justificar el consumo de animales. Más bien, de manera muy explícita, se busca segregar esta práctica como objetable sin reconocer que es indistinguible de aquello que apoya y en lo que participa la mayoría de la gente si consumen pollo u otros productos animales.

Como Vincent Guihan observó:

Si un grupo implementó una cruzada contra los métodos judíos de circuncisión —y solo la circuncisión judía— y entonces niega que la campaña fue antisemita, pienso que la mayoría de las personas probablemente estarían en desacuerdo y la verían como lo que es: una vergonzosa, calculada y completamente inaceptable campaña que además denigra a una ya marginalizada comunidad para congraciarse con la mayoría. Casi todas las campañas de un solo tema alientan activamente la segregación. Y eso no es algo bueno para los humanos ni para los no humanos.

Las campañas de un solo tema son, en muchos aspectos, una muy mala idea. Sirven a un solo objetivo primordial: los dispositivos de recaudación de fondos para las organizaciones animalistas de caridad. Esto no quiere decir que estas organizaciones adoptan intencionalmente campañas que saben que son contraproducentes con el fin de ganar dinero. Es, sin embargo, para explicar la motivación práctica que ayuda a dar cuenta de por qué se eligen este tipo de campañas de reformas bienestaristas y las campañas de un solo tema, y la incapacidad de ver lo contraproducentes que son.

**********

Si no son veganos/as, por favor háganse veganos/as. El veganismo es acerca de la no violencia. Primero y principal, es acerca de la no violencia hacia otros seres sintientes. Pero es también respecto de la no violencia hacia la tierra y hacia ustedes mismos.

¡El mundo es vegano! Si vos lo querés.
Gary L. Francione
Board of Governors Distinguished Professor, Rutgers University

[1] Se llama despectivamente “red-neck” al blanco inculto de las áreas rurales del sur de los EE.UU. y “bakward” al “atrasado” o “subdesarrollado.” [Nota de la traductora]

©2014 Gary L. Francione
©2014 de la traducción, por Ana María Aboglio.

APÉNDICE AGREGADO el 16 de julio de 2014:

Solicito respetuosamente que si la Alianza para Kaporos continúa esta campaña, que se coloque en el sitio web de la Alianza, y lo incluya en todas las futuras peticiones, correspondencia y presentaciones, una declaración en el sentido de que:

«La Alianza reconoce que la utilización de los pollos como en Kapparos no se diferencia del transporte y la matanza de pollos en contextos no religiosos y que la Alianza no sostiene que cualquier persona involucrada en el evento Kapparos participa en conductas moralmente más odiosas que aquéllas en las que participan quienes matan pollos en contextos no religiosos, o quienes consumen pollo (u otros productos de origen animal). Por lo tanto, la Alianza promueve el veganismo y su oposición a Kapparos debe verse en ese contexto y no como dirigido específicamente a la comunidad involucrada en esta práctica.»

Esto no quiere decir que en tal caso yo estaría de acuerdo o apoyaría la campaña. No lo haría. Aún sigo preocupado por el hecho de que tal campaña segrega a un grupo y los hace aparecer como la gente “mala” por hacer lo que todo el resto de la gente también hace. Solo estoy sugiriendo un modo posible que puede ayudar a mitigar el tono problemático de esta campaña y dejar en claro que la explotación animal no es algo que hacen otros y que, por el contrario, es algo en lo que casi todos están involucrados.
Gary L. Francione

APÉNDICE AGREGADO EL 18/19 de junio de 2014

Recibí varios mensajes enconados en relación con mi preocupación respecto de esta campaña, incluyendo una acusación de un miembro de la Alliance to End Chickens as Kaporos en el sentido de que la oposición a esta campaña constituye “intolerancia.”

Otro defensor de los animales afirmó, en respuesta a mis preocupaciones: «creo que es mejor centrarse más en el reconocimiento y la apreciación de los demás, en vez de un criticismo que puede ser doloroso y desalentador.» Pero eso solo dice que debemos ser cómplices de campañas que faciliten la discriminación y la segregación en lugar de hablar en contra de ellas; debemos ser tolerantes con la intolerancia. Es un llamado a ignorar nuestra responsabilidad moral. Esto no es aceptable.

Varios defensores dijeron que debido a que la campaña Kapparos se está llevando a cabo por veganos que se oponían a todo uso de los animales, la campaña era realmente acerca del veganismo y no era problemática. Pero eso es simplemente un error. Si una campaña identifica algún grupo como implicado en una conducta que es indistinguible de la conducta en que cada no vegano participa (directa o indirectamente) y apoya, como la campaña Kapparos claramente hace, entonces es problemático de las maneras en que lo identifiqué. El hecho de que las personas involucradas en la campaña puedan ser veganas es completamente irrelevante.

Y miren este video que está en el sitio de la Alliance to End Chickens as Kaporos. Pregúntense ustedes mismos si esto promueve de algún modo el veganismo.

Un defensor afirmó que debido a que algunos judíos apoyaron la campaña Kapporos, eso «sirve para disipar la idea de que promueve el antisemitismo.»

Pero eso también es claramente erróneo. Es como decir que el hecho de que algunas personas de color se oponen a los esfuerzos para incrementar los derechos civiles significa que no existe ninguna discriminación que necesite ser abordada.

Otro defensor dijo que si alguien pensaba que la campaña anti-Kapparos estaba dando un mensaje de que el uso de los pollos, tal como en Kapparos, estaba apuntando a la conducta judía de una manera determinada, la Alliance Against Chickens as Kaporos no debería ser responsable por esa «disonancia cognitiva». (Creo que quiso decir «malentendido», dado que «disonancia cognitiva» no tendría ningún sentido en este contexto.)

Una vez más, esto es claramente errado. Volvamos al excelente ejemplo de Vincent Guihan. Si un grupo que se opone a toda la circuncisión tenía una campaña en particular llamada Alianza contra la circuncisión judía, ¿sería una cuestión de malentendido si el público la vio particularmente como referida a una práctica judía? Por supuesto que no. La existencia misma de la campaña sugiere que la conducta judía es el problema en particular.

Lamento sinceramente que algunos defensores de los animales sientan de la manera que lo hacen y estén desechando las inquietudes respecto de la campaña Kapparos a favor del principio sagrado «jamás has de criticar lo que hace otra ‘persona animalista’, incluso si es claramente problemático.» Eso no es otra cosa que un pensamiento de culto, lo que es contrario a la existencia de un movimiento dinámico en pos de la justicia social. He llegado, a regañadientes, a la conclusión de que muchos defensores de los animales son aparentemente ajenos al antisemitismo, la islamofobia y otras formas de discriminación sistemáticas, incluidos el racismo y el sexismo, y a cómo muchas campañas de un solo tema, como por ejemplo la campaña Kapparos, capitalizan en, y exacerban, los efectos de estas formas de discriminación.

Gary L. Francione.

©2014 Gary L. Francione
©2014 de la traducción, por Ana María Aboglio.